nuevo estudio sobre el sueño

La mayoría de las personas piensan que los adultos deben dormir 8 horas para descansar adecuadamente. Sin embargo los estudios más recientes están desmitificando el número de horas.
Un nuevo estudio publicado en la revista Archives of General Psychiatry nos ahorra una hora de sueño al rebajar el tiempo a 7 horas. Pero, todo depende de la vida que lleves como veremos luego.
Después de estudiar durante seis años el descanso nocturno de más de un millón de personas, los resultados apuntan a que las que duermen 7 horas cada noche tienen una tasa de mortalidad menor que las que duermen menos de seis horas u ocho horas o más.
Generalmente, y como bien sabes, a medida que tenemos más años tendemos a necesitar menos horas para dormir.
Por este motivo, los bebés duermen unas aproximadamente 17 horas al día, que se van reduciendo poco a poco, dado que a los 18 meses el niño duerme unas 14 horas.
Sin embargo, a los 4 años el niño tiende a dormir 12 horas, y a partir de los 10 años las horas de sueño bajan hasta las 10 horas.
Pero como adultos, la mayoría de ellos necesita entre 7 y 8 horas, que no obstante se continúan reduciendo según continuamos envejeciendo.
A pesar de todo lo indicado, no pueden establecerse un número total de horas de sueño, ya que hay personas que necesitan un determinado número de horas, y otras algo más.
Por ello, una persona que duerma entre 6 y 7 horas puede sentirse algo más descansado que una que duerma 10 horas, ya que implica que se ha despertado en la mitad de un ciclo de sueño.

Dormir Bien

Para dormir bien, debe considerarse las características individuales, porque cada persona necesita unas horas de sueño en función de su estilo de vida y edad.
Los bebés duermen casi todo el día porque lo necesitan para crecer tan rápidamente, las embarazadas duermen más horas para mantener el crecimiento fetal y los ancianos duermen pocas horas.
Si eres una persona deportista y entrenas al menos una hora cada día, debes añadir entre 15 y 30 minutos más de sueño a tus días.
Los atletas profesionales como Paula Radcliffe o Marta Domínguez son grandes dormilonas, confiesan pasar en brazos de Morfeo al menos 12 horas diarias, con siestas “de pijama” de 2 ó 3 horas, para poder asimilar las dobles sesiones de entrenamiento diario.
Además has de considerar tu genética, desde el nacimiento los bebés duermen más o menos horas con la misma edad, si desde pequeño has dormido más horas que los demás, es porque lo necesitas, así como al contrario, si te bastan 6 horas al día para sentirte bien, dormir más puede disminuir tu energía y hacerte sentir mal.
Para dormir bien, también debes analizar que afecta tu sueño particularmente. Cada persona es un mundo diferente. Por ejemplo algunas personas duermen bien si se acuestan cansados al leer o escribir, para otras, es negativo y no deben hacer actividades intelectuales por lo menos 1 hora antes de dormir.

Despertarse

Esta sensación también es muy subjetiva, al envejecer el sueño no es tan profundo y reparador que nos hemos despertado 4 ó 5 veces cada noche aunque no es cierto.
El despertarse ya sea a manera de sensación o real, no es sinónimo de dormir bien. Lo ideal es que tengamos la sensación de “un solo sueño”, es decir recordar que nos hemos acostado y luego despertamos sin ninguna sensación del despertarse.
Si tienes esta sensación de desvelo, algo va mal en tu sueño y se han alterado los ciclos normales de cada noche, por lo que puedes sentirte sin energía a lo largo del día. Ponte en manos de un especialista para conseguir recuperar el sueño.
En todo caso siempre puedes hacer sesiones de relajación previas, escuchar música con sonidos de la naturaleza, o sonidos monótonos en ondas alpha.
Asimismo, cuidar los nutrientes que te puedan estar faltando como el magnesio o los estimulantes que puedan estar en exceso.
Hay personas que no pueden evitar quedarse dormidos estando de pie, hablando e incluso comiendo con la cuchara en la boca, en la mayoría de los casos la causa está en que no duermen suficiente, pero otros se debe a una enfermedad conocida como narcolepsia.

Café, té, chocolate para dormir

El café, té y chocolate contienen diferentes concentraciones de cafeína, un estimulante que aumenta la capacidad de alerta y ayuda a evitar el sueño.
Cada persona tiene un nivel de tolerancia diferente a la cafeína, algunas pueden tomar 7 cafés cargados al día y dormir bien, y otras con un té se desvelan.
Si tienes problemas de sueño es mejor que evites las bebidas con cafeína, revisa también las bebidas energéticas y los refrescos porque algunos tienen altas dosis de cafeína. Si no tienes problemas de sueño y estás en buena forma, un vaso de cacao caliente te puede ayudar a dormir mejor.
Ya lo sabes dormir nos hace mucho bien.