Bienvenidos a la tercera semana de nuestra apertura de verano. Hoy es
treinta de julio de 1997, y estamos en el Hamlet Superior. Hemos estado
practicando meditación sobre los guijarros durante las dos semanas pasadas,
y espero que los niños que recién llegaron ayer y hoy continúen con nuestra
práctica de los seis guijarros. Hay niños que han estado aquí durante las dos
últimas semanas, y ellos les mostrarán cómo practicar meditación sobre los
guijarros. Ustedes harán una pequeña bolsa como esta, y encontrarán seis
guijarros como estos, pequeños guijarros. Lávenlos cuidadosamente,
séquenlos, y pónganlos en la bolsa.
Hoy aprenderemos juntos un breve poema, los jóvenes y también los menos
jóvenes. Vamos a usar los guijarros para practicar el poema también. Sería
maravilloso si pudieran memorizar el poema breve para practicar. Algunos de
ustedes ya lo conocen de memoria, pero puede haber algunos de ustedes
que aun no hayan sido introducidos a la práctica de este poema.: “Adentro,
afuera. Profundo, lento. Calma, tranquilidad. Sonríe, relaja. Momento
presente, momento maravilloso.” Me imagino que la mayoría de nosotros ya
lo podemos cantar. ¿Cantamos?
Adentro, afuera.
Profundo, lento.
Calma, tranquilidad.
Sonríe, relaja.
Momento presente,
Momento maravilloso.
Este es un poema maravilloso, porque cada vez que lo practicas te sentirás
mucho mejor dentro de tu cuerpo y tu mente. Cuando estás enojado, cuando
estás preocupado, cuando sufres, si sabes cómo practicar este poema
entonces te sentirás mucho mejor sólo después de uno o dos minutos.
Voy a recordarles el modo de practicar. Primero, “adentro” y “afuera”. Esto
significa que cuando inhalo, sé que estoy inhalando. Es fácil. Y cuando
exhalo, sé que estoy exhalando. No mezclo las dos cosas. Inhalando, sé que
esta es mi inhalación. Exhalando, sé que es mi exhalación. Por ese momento,
detienes todo el pensamiento, sólo prestas atención a tu inhalación y a tu
exhalación. Estás 100% con tu inhalación y con tu exhalación.
Es como sostener a un bebé de tal modo que lo sostienes con el 100% de tu
mismo. Supongamos que esto es un bebé y sostengo al bebé así. Sostengo
al bebé con el 100 % de mí mismo. Recuerden, hay veces en que su madre
los sostiene así. ¿Han visto la imagen de la Virgen María sosteniendo al niño
Jesús? Ella lo sostiene así: 100%. Entonces aquí, nuestra inhalación es
nuestro bebé, y sostenemos nuestra inhalación al 100 %. “Inhalando, sé que
estoy inhalando”. Sólo abrazas a tu inhalación, nada más. No pienses nada
más. Este es el secreto del éxito.
Cuando inhalas, simplemente inhalas, no hagas nada más. ¿Crees que lo
puedes hacer? Les pregunto a los adultos, también, ¿creen que pueden
hacerlo? Sólo abracen su inhalación – respiren con el 100% de ustedes
mismos- mente y cuerpo juntos. Y cuando exhalen, abracen su exhalación.
Identifiquen su inhalación como inhalación, porque cuando sostengo a mi
bebé yo sé que este es mi bebé, no otra cosa. Así, “adentro, afuera” significa
“inhalando sé que esta es mi inhalación, exhalando, sé que esta es mi
exhalación”. Es muy simple, pero es maravilloso. Estoy seguro de que si lo
intentan, después de dos o tres inhalaciones y exhalaciones ya se sentirán
mucho mejor. Puedo garantizarlo porque lo he hecho y siempre se siente
maravilloso.
Si están por llorar, si están por patear o golpear algo porque tienen ira, y si
saben cómo volver a ustedes mismos y practicar “adentro, afuera” tres
veces, estoy seguro de serán diferentes. No llorarán, no patearán, no
golpearán porque son personas mucho mejores después de practicar
“adentro, afuera”. Hoy, intenten y verán el poder de la práctica.
Entonces, después de haber practicado “adentro, afuera”, tres, cuatro, o
cinco veces, sentirán que su inhalación se ha vuelto más profunda y su
exhalación se vuelve más lenta. Porque cuando están enojados, cuando
están en desesperación, cuando sufren, su inhalación y su exhalación son
muy cortas y no calman en absoluto. Pero luego, después de haber respirado
apaciblemente, su inhalación será muy suave. Su exhalación también.
Entonces la calidad de su respiración ha sido mejorada. Su inhalación es más
profunda y más calma, su exhalación también es más profunda y más calma.
Esta es la razón por la cual podemos practicar “profundo y lento”.
Inhalando, sé que mi inhalación se ha vuelto más profunda, y cuanto más
profunda es, más placentera se vuelve. Intenten inhalar varias veces y verán
que es más profunda. Y cuando es más profunda, sentirán mucho placer.
Cuando exhalan, dicen “exhalando, sé que mi exhalación se ha vuelto más
lenta, más lenta, más pacífica”. Si su respiración es más profunda, ustedes
son más profundos. Si su respiración es más lenta, ustedes son más lentos.
Esto significa que son más pacíficos. Entonces, inhalando, sé que mi
respiración se ha vuelto más profunda. Exhalando, sé que mi respiración se
ha vuelto más lenta. Es maravilloso.
Podrían usar sus guijarros también. Si están practicando meditación
sentados, pongan los guijarros a su izquierda, se inclinan hacia sus guijarros,
y levantan un guijarro con dos dedos. Un guijarro. Lo miran y lo ponen en la
palma de su mano izquierda y comienzan a practicar inhalar y exhalar,
“Adentro, afuera”. La práctica es suave. “Adentro, afuera”. Una vez más.
“Adentro, afuera”. Se sentirán mucho mejor. Entonces, uso mis dos dedos
para tomar el guijarro y ponerlo a mi lado derecho. He practicado “adentro,
afuera” ya.
Ahora, me gustaría practicar “profundo, lento”. Entonces, tomo otro guijarro.
Lo miro. Lo pongo en mi mano izquierda y comienzo a practicar. “Profundo,
lento”. Se ha vuelto más profundo por sí mismo, no tienen que hacerlo más
profundo. Se ha vuelto más profundo por sí mismo solo porque ya han
practicado tres veces “adentro, afuera”. Esta es la razón por la cual su
respiración se vuelve más profunda naturalmente, y más lenta. Practiquemos
juntos “profundo, lentito”, tres veces. “Profundo, lento” (pausa para tres
respiraciones). Bien, hemos terminado con “profundo, lento”. Levantamos el
guijarro y lo colocamos a nuestro lado derecho.
Ahora practicamos la tercera línea: “calma, tranquilidad”. Esto significa
“inhalando, siento calma. Exhalando, siento que tomo todo con tranquilidad”.
Este ejercicio es maravilloso para practicar, especialmente cuando están
nerviosos, cuando están enojados, cuando no sienten paz en ustedes.
¡Rápido, rápido! Deben volver a su inhalación y exhalación y practicar
“calma, tranquilidad”.
Este es un ejercicio dado por el mismo Buddha en un sutra llamado
Ânâpânasati Sutra, el “Sutra de la respiración conciente”. “Inhalando, calmo
las formaciones mentales en mi. Exhalando, dejo ir”. Dejo ir mi ira. Calmo mi
ira, calmo mis preocupaciones, calmo mis celos. Y dejo ir mi ira, dejo ir mis
celos. Creo que los adultos tienen que practicar junto a los niños. Cada vez
que el niño está enojado entonces su madre o su padre deberían tomar su
mano e invitarlo a practicar. “Calma, tranquilidad”. “Vamos, juntos,
practiquemos calma y tranquilidad. Inhalando, me calmo, exhalando, dejo
ir”, al menos tres veces y se sentirán mucho mejor.
Pueden comenzar directamente con “Calma, tranquilidad”, o podrían
comenzar de un modo clásico con “Adentro, afuera”, y luego “Profundo,
lento”, y finalmente “Calma, tranquilidad”. De cualquier modo está bien. El
Buddhadharma es maravilloso. El momento en que tomas el dharma y
practicas comienzas a sentirte mejor justo en ese momento. Y a medida que
continúas la práctica, tu calidad de ser siempre sigue mejorando.
Les propongo practicar tres veces “Calma, tranquilidad” pero nadie les impide
practicar más que eso: cuatro veces, cinco, seis veces, si quieren. Creo que
les gustará porque los hace sufrir menos. Y si pueden practicar ocho veces,
diez veces, se sentirán mucho mejor. “Calma, tranquilidad”.
Luego llegarán al cuarto guijarro, y este es “Sonríe, relaja. Sonríe, relaja”.
“Inhalando, sonrío”. Pueden sonreír ahora. Pueden sentir que es muy difícil
sonreír, demasiado difícil sonreír. Pero después de haber practicado tres o
cuatro veces sentirán que son capaces de sonreír. Y si pueden sonreír, se
sentirán mucho mejor. Pueden protestar: “Thay2, no tengo alegría en mí,
¿por qué quieres que sonría? Eso no es natural.” Muchas personas me
preguntan así, no sólo niños, sino gente crecida. Protestan: “Thay, no tengo
alegría en mí. No puedo forzarme a sonreír, no sería verdad, no sería
natural”.
Siempre digo que una sonrisa puede ser una práctica, una clase de práctica
de yoga. Yoga de la boca: sólo sonrían aunque no sientan alegría, y verán
después de sonreír que se sienten diferentes. A veces la mente toma la
iniciativa y a veces deben permitir que el cuerpo tome la iniciativa.
A veces el espíritu guía, y a veces el cuerpo puede guiar. Esta es la razón por
la cual cuando tienen gozo, naturalmente sonríen. Pero a veces pueden
permitir que la sonrisa vaya primero. Intentan sonreír y súbitamente sienten
que ya no sufren tanto. Así que no discriminen contra el cuerpo. El cuerpo
también puede ser un guía, no sólo el espíritu. Les propongo que intenten
esto cuando despiertan durante la noche. Está totalmente oscuro. Inhalen y
sonrían, y verán. Sonrían a la vida. Están vivos, sonríen. Esta no es una
sonrisa diplomática, porque nadie los ve sonreír. Aunque la sonrisa es una
sonrisa de iluminación, de gozo – el gozo que sienten por estar vivos.
Así que sonreír es una práctica. No digan: “No tengo alegría, ¿por qué debo
sonreír? Porque cuando tienen alegría y sonríen, eso no es práctica, es muy
natural. Cuando no tienen alegría y sonríen, eso es una práctica real. Ustedes
saben que hay algo así como 300 músculos, pequeños y grandes en su
rostro. Cada vez que estamos enojados o preocupados todos esos músculos
están muy tensos. Cuando la gente los mira con esa tensión en su rostro,
ellos no los ven como una flor. Las personas les temen cuando todos los
músculos en su rostro están así de tensos. Parecen más una bomba que una
flor. Pero si saben cómo sonreír, en solo un segundo, todos esos músculos
están relajados y su rostro parece una flor nuevamente. Es maravilloso.
Así que debemos aprender a sonreír y entonces nos veremos presentables en
ese momento. Miren al espejo y practiquen, y verán que la práctica de la
sonrisa es muy importante. Trae relajación y pueden dejar ir. Sienten que
están liberados de la atadura de la ira, de la desesperación. (Campana)
A mi derecha, ya hay cuatro guijarros. Ahora me gustaría practicar el quinto
guijarro. Esta es la práctica más maravillosa. El quinto guijarro puede
traerles mucha alegría, mucha iluminación, mucho deleite. Esto es “Momento
presente, momento maravilloso. Momento presente, momento maravilloso”.
Esta es una enseñanza muy profunda del Buddha. El Buddha dijo que es
posible vivir felizmente aquí mismo y ahora mismo. No tenemos que ir al
futuro. No tenemos que ir a otra parte para ser felices. Podemos ser felices
aquí mismo y ahora mismo. No necesitan más condiciones para ser felices,
ya tienen suficientes condiciones para ser felices aquí mismo y ahora mismo.
Si sabemos cómo ser nosotros mismos y mirar adentro y alrededor de
nosotros, vemos que hemos tenido condiciones suficientes para ser felices.
Esta es la práctica de vivir felizmente en el momento presente.
Cuando inhalan, sienten que están vivos. La vida es accesible para ustedes,
ahora: el cielo azul, la nube blanca, la vegetación verde, los pájaros
cantando. Plum Village está aquí. Muchos amigos están aquí. Su padre aun
está vivo, su madre está con ustedes, su hermano está aquí, su hermana
está aquí. Tienen pies fuertes. Pueden correr. Tienen ojos que pueden
ayudarlos a ver todo. Hay muchas condiciones para su felicidad, no necesitan
nada más, pueden ser felices ahora mismo. Dejen de correr. Esta es la
práctica. Porque hay gente que corre toda su vida; ellos corren porque creen
que la felicidad no es posible en el aquí y el ahora.
Así que esta es una enseñanza maravillosa del Buddha. Inhalan y dicen
“Momento presente”. Esto significa “me establezco en el momento presente.
No necesito correr más”. Esta es la práctica de samatha, detener. Detener el
correr. Estoy maravillosamente así en mi posición de sentado o en mi
posición de caminar o incluso en mi posición acostado. Es tan maravilloso
que no necesito correr más. Detener. Momento presente, momento
maravilloso. Es maravilloso que estén vivos.
Estar vivos, esto es un milagro. Imaginen a una persona que ya está muerta.
Puede que no hayan visto a una persona muerta pero habrán visto a un
pájaro muerto, un animal muerto. No importa lo que hagan, el animal no
puede volver a la vida. Cualquier cosa que digan, cualquier cosa que hagan,
el animal no puede escuchar, oír. Una persona muerta también es así. Yace
en la cama y no importa lo que hagan, no pueden revivirla. No pueden
volverla a la vida nuevamente. Lloran, golpean su pecho, tiran de su cabello.
Pero esa persona ya está muerta.
Entonces, cuando se miran a ustedes mismos, ven que aun están vivos. Ven
que la persona que aman aun está viva. Esto es maravilloso. Deben
despertar a este hecho. La enseñanza del Buddha es la enseñanza del
despertar, despertar a ver todas estas cosas maravillosas aun están
disponibles. Entonces dejan de correr, se establecen en el momento
presente. “Inhalando, estoy en el aquí y en el ahora. Momento presente.
Exhalando, siento que este es un momento maravilloso, maravilloso”.
El Buddha dijo que la vida está disponible sólo en el momento presente. El
pasado se ha ido, el futuro aun no llegó, tienen sólo un momento para estar
vivos. Ese es el momento presente. Tan simple y tan profundo. Tienen una
cita con la vida. No deberían perder esa cita. La vida es lo más precioso.
Deben conocerla, deben estar con ella. Y ustedes saben algo, la vida solo
está disponible en el aquí y el ahora, en el momento presente. Así que no
pierdan su cita con la vida. No pierdan el momento presente. Esta es la razón
por la cual la quinta práctica es maravillosa. Si practican así, tienen mucha
alegría ya sea que estén en su almohadón o en su cama o en la posición de
meditación caminando. “Momento presente, momento maravilloso”.
Ahora me gustaría pedirles que cantemos y practicaré. Practico por ustedes.
Practicaré inhalar y exhalar y disfruto por ustedes.
(La comunidad canta: “Adentro, afuera. Profundo, lento. Calma, tranquilidad.
Momento presente, momento maravilloso”).
Creo que por ahora todos conocen el gatha3 de memoria. Me gustaría
decirles que este gatha es también bueno para practicar meditación
caminando. Haremos meditación caminando después de la charla y ustedes
pueden caminar pacíficamente y felizmente con este poema. Inhalan y hacen
dos pasos. Dicen: “Adentro, adentro”. Luego exhalan y hacen otros dos
pasos: “afuera, afuera”. Esto es meditación caminando. No hacen nada más.
Su mente y su cuerpo están totalmente para el inhalar, el exhalar, y el dar
los pasos. Están perfectamente concentrados en caminar y respirar, no se
preocupan con otras cosas. Y pueden seguir con: “Adentro, afuera” así por
unos minutos. Si quieren caminar un poco más rápido, pueden hacer tres
pasos mientras inhalan y exhalan.
Lo hacen muy naturalmente, de tal modo que tienen mucho placer. No sean
tan serios, tan solemnes. Lo hacen muy, muy naturalmente. “Adentro,
adentro, afuera, afuera”. Si disfrutan el caminar, se sienten maravillosos.
Están haciendo la práctica correctamente. Después de algún tiempo, cambian
a “profundo, lento”. “Profundo, profundo, lento, lento, profundo, profundo,
lento, lento”. Muy concentrados. Y estaremos caminando con ustedes. Todos
están concentrados. Todos están pacíficos. Todos están gozosos. La energía
del gozo y de la paz irradiará de cada persona, y si caminamos así en la
Sangha, recibiremos la energía colectiva y será muy, muy fuerte.
Queda aun otro guijarro. Pero para este gatha no necesitamos todos los
guijarros, sólo necesitamos cinco. Después de que hayan practicado cinco
gathas, su meditación sentada está hecha. Así que escuchan el sonido de la
campana, juntan sus guijarros, y los ponen en su bolsita.
¿Creen que mi bolsita es hermosa? Me gusta mucho este color. Si quieren
tener su bolsa en amarillo o naranja, son bienvenidos. Hagan una bolsa de
guijarros muy hermosa para su meditación porque van a practicar usándola
aquí. Y cuando vayan a casa continuarán usando su bolsa de guijarros de
meditación. Si los adultos quieren imitar, son bienvenidos. Es maravilloso.
Hay algunos de nosotros que tenemos rosarios – de 108 cuentas4- y el uso
del rosario es exactamente como el uso de los guijarros. Pero creo que de
este modo es divertido.
Así que por favor, jóvenes, creo que hoy tienen muchas cosas por hacer.
Háganlas con alegría. Espero que los niños que han estado aquí durante una
o dos semanas transmitirán la enseñanza de los guijarros de meditación a los
niños nuevos y entonces practicaremos juntos. Ahora, cuando escuchen la
campana, por favor pónganse de pie e inclínense a la Sangha antes de irse y
continuar la práctica. (Campana)
Me gustaría darles un poco más de instrucción acerca de la respiración
conciente. No intenten inhalar. No hagan ningún esfuerzo para inhalar. Es
muy importante. Permítanse inhalar naturalmente. Ustedes respiran de
todos modos, ¿por qué deben hacer una determinación para inhalar? Ese es
el punto. Permítanse inhalar normalmente. Sólo presten atención a su
inhalación. No digan: “Mi inhalación, ven aquí, te diré cómo hacerlo”. No.
Permítanse inhalar, eso es todo. Corto o largo, permitan que sea como sea.
Sean completamente no violentos mientras sostienen a su bebé. No fuercen
a su bebé para ser así o ser de otro modo, permitan que sea como es.
Abrácenlo sólo con su atención. Es muy importante.
Cuando aman a alguien, le permiten ser. No dicen: “Si no haces esto, no te
amaré”. Esta ya es la práctica del amor. Permitir a su inhalación ser ella
misma. Sólo abrazarla con la energía de la atención. “Inhalando, estoy
conciente de que inhalo”. Eso es todo. El impacto será grande.
Muchas personas practican como ellos son en un duro campo de trabajo. Se
fuerzan a ustedes mismos, hacen demasiado esfuerzo, y se cansan después
de algún tiempo. Si saben cómo permitirse descansar, permitir a su
inhalación y a su exhalación fluir naturalmente, nunca se cansarán. Sólo
necesitan encender su atención y estar concientes de eso. Como cuando
encienden la luz, sólo encienden la luz. Y a causa de la luz ustedes son
concientes de que la campana está allí, su amigo está allí. La conciencia es
así. Entonces reconocen su inhalación como una inhalación, su exhalación
como su exhalación, y las abrazan con amor.
Entonces en ningún tiempo en absoluto, su cualidad de ser será mejorada.
Como un bebé sufriendo que está pateando, llorando, vibrando. Ustedes no
dicen: “¡Ahora, detente, no llores, no te agites!” No dicen eso. No hacen
nada; no intervienen. No lo fuerzan para ser como ustedes quieren. Sólo
levantan al bebé y lo abrazan con todo su ser. Cuando tienen la energía de la
ternura, de amor y cuidado, esa energía naturalmente penetrará en el bebé y
habrá una transformación. Muchos de ustedes han sido una madre o un
padre y saben esto. Sólo sostienen al bebé con su ternura, con la totalidad
de su presencia. Y a esa presencia total, cuerpo y mente concentrados,
podemos llamarla atención (y ustedes son capaces de ser atentos, ustedes
saben). Entonces cultiven su atención de modo que sean más atentos, de
estar allí para su sufrimiento, para ustedes mismos, para sus personas
amadas.
En la meditación sentada también lo hacen así. No luchen para sentarse.
Permítanse sentarse de un modo relajado. “Sonríe, relaja”. Recuerden, ¿hubo
un tiempo en que se sentarían en su living mirando televisión? ¿Podrían
sentarse durante una hora, incluso dos horas? Y no se quejaban de que
tenían dolor en los hombros o brazos. Sólo permítanse sentarse. La
meditación sentada no es una lucha. Si la toman como una lucha, se
cansarán. Después de quince minutos sentirán dolor en sus hombros y en su
cabeza. Entonces, permítanse descansar. Cuando practican meditación
sentada, meditación caminando, permítanse descansar. Es posible descansar
mientras se practica la meditación caminando, la meditación sentada, la
respiración conciente. De hecho, les ofrezco esta práctica como un medio
de descanso.
Muchos de nosotros tomamos vacaciones. Pero durante el tiempo de
vacación no sabemos cómo descansar. Entonces después de la vacación
estamos más cansados. Así, ahora nos permitimos descansar nuestro cuerpo
y nuestro espíritu. Aquí, estamos aprendiendo el arte de descansar.
Meditación como la práctica del descansar.
Nuestro cuerpo tiene la capacidad de curarse a sí mismo. Ustedes lo saben.
Cuando se cortan un dedo, ¿tienen que hacer algo? No. Sólo deben
mantenerlo limpio y en pocos días se habrá curado. Su cuerpo tiene un
número de problemas dentro porque no le han permitido descansar. Si
ustedes conocen el arte de la relajación total, el arte de permitir a su cuerpo
descansar, la mayoría de esos problemas se irán después de algunas
semanas.
Cuando un animal está herido en los bosques, sabe cómo hacer esto. Busca
un rincón apacible en la selva y yace durante varios días. Varias
generaciones de ancestros les han transmitido la sabiduría de que esta es la
única forma de restaurarse a sí mismos. Ellos no necesitan doctores, no
tienen farmacéuticos, pero saben cómo descansar. Y un día el animal está
curado y se levanta y va a buscar una fuente de alimento.
Nosotros no sabemos cómo hacer como los animales. Para recuperarnos bien
rápidamente hacemos muchas intervenciones en nuestro cuerpo: tomamos
un montón de drogas; soportamos un montón de tratamientos. Pero no
sabemos cómo permitir a nuestro cuerpo descansar. Así que aprender cómo
permitir que tu cuerpo descanse es una práctica muy importante. Ama a tu
cuerpo. Aprende la relajación total y puedes hacerlo varias veces al día.
Cinco minutos es suficiente, diez minutos. Incluso tres minutos ya están muy
bien si sabes cómo permitir a tu cuerpo que descanse completamente.
Y para tu espíritu es lo mismo. Nuestra conciencia puede curarse a sí misma.
Tiene el poder de auto curarse pero ustedes no le permiten descansar.
Continúan alimentando su conciencia con su ira, sus preocupaciones, su
pensamiento, y demás. Ustedes no creen en su conciencia. Están buscando
un medio de curarla pero no saben cómo permitirse descansar. Siguen
pensando todo el día y siguen preocupados todo el día. Nunca se permiten
descansar. Si saben cómo practicar relajación total, ustedes sabrán cómo
sonreír y cómo enviar su sonrisa a diferentes partes de su cuerpo. Durante
ese tiempo, han dejado de pensar y preocuparse porque están enfocados en
su cuerpo, su respiración, su caminata. Cuando practican respiración
conciente, cuando practican “Adentro, afuera, profundo, lento” no sólo
pueden nutrirse – cuerpo y espíritu- sino que pueden también detener su
pensamiento. Detener el pensamiento, detener las preocupaciones, es muy
importante. Nuestra mente es como un casete funcionando sin parar día y
noche. Tenemos un hábito. Ustedes no están allí, porque están siendo
llevados por su pensamiento, por sus preocupaciones. Pueden perderse en el
pasado, arrepintiéndose del pasado o siendo atrapados en el sufrimiento que
soportaron durante el pasado. Ya sufrieron en el pasado pero ahora quieren
sufrir más recordando el pasado. Llaman a su pasado para sufrir más. ¿Por
qué deben mostrarlo varias veces, su sufrimiento? Las vacas, cuando comen
hierba, la tragan y luego la vuelven a traer nuevamente y la tragan por
segunda vez. Muchos de nosotros hacemos lo mismo. Hemos sufrido ya en el
pasado. Pero queremos traer de nuevo nuestro sufrimiento al momento
presente y sufrir más. Nos gusta eso.
El futuro aun no llegó pero pensamos en él y nos preocupamos, y nos
volvemos asustados. No somos capaces de residir en el momento presente
donde está la vida. La vida y sus muchas maravillas están disponibles dentro
de ti y a tu alrededor y aun así no eres capaz de tocar sus maravillas porque
te pierdes en el pasado, en el futuro, y también en tus proyectos, tus
preocupaciones. ¿Cómo puede descansar tu mente y restaurarse? Nuestra
mente también tiene la capacidad de auto curarse así como nuestro cuerpo.
Recuerden cuando perdieron a alguien muy querido, sufrieron, y creyeron
que nunca se recuperarían, que nunca podrían olvidar ese sufrimiento.
Creyeron que el sufrimiento residiría con ustedes, la herida estaría con
ustedes siempre. Pero algún tiempo después se acostumbraron a eso y
fueron capaces de seguir con la vida. Esto significa que su mente, su espíritu,
era capaz de curarse a sí mismo.
Tenemos que confiar en nuestro espíritu del modo que confiamos en nuestro
cuerpo. Nuestro espíritu tiene el poder de auto curarse si sólo sabemos cómo
permitirle descansar y no continuar alimentándolo con más preocupaciones,
más proyectos, más temor. La práctica de la respiración conciente, la
caminata conciente, disfrutar de la contemplación del cielo, de la vegetación,
de estar con amigos, disfrutar las cosas en el momento presente, te ayuda a
detener esa clase de sensaciones – el corazón y el espíritu llenos de
preocupaciones y de temor. Te curarás por dentro.
Durante el tiempo en que estás aquí en Plum Village, estás rodeado de
muchos amigos que están practicando el descansar, recuperándose. Haz un
montón de relajación total, relajación conciente, caminata, y meditación
sentada, y disfruta de hacer las cosas atentamente para ayudar a la Sangha.
(Campana)
Muchos de nosotros hemos tenido la buena suerte de tener un padre
amoroso, una madre amorosa, un maestro amoroso, o un hermano o
hermana amorosos. Debemos llamarlos para que ayuden. Ya sea que estén
vivos aun o que hayan muerto, siempre están allí en ti.
Un padre siempre quiere amar a su hijo. Esta es la más profunda naturaleza
de un padre. Si ves que tu padre no te ama, es porque no fue capaz de
manifestar su amor, eso es todo. Nadie lo ha ayudado a expresar su amor.
Todos los padres, en lo profundo, quieren amar a sus hijos. Pero si dicen:
“¡Te odio! ¡No te reconozco como mi hijo!” es porque no saben cómo hacerlo.
No significa que un padre no ame a su hijo. Ustedes también, aman a sus
hijos aun si sus hijos hacen cosas que ustedes consideran negativas, que los
irritan. Aun, en lo profundo, el amor que tienen por sus hijos está intacto.
Sólo necesitan aprender cómo expresar su amor. Hay mucha gente que cree
que su padre o su madre no los ama, muchas personas son víctimas de esa
visión. Pero, de acuerdo a mi experiencia, todos los padres aman a sus hijos,
profundamente. Todas las madres también. Incluso los animales, aman a sus
hijos.
Cuando miran su mano – si miran profundamente- verán que esa mano de
ustedes es también la mano de su madre y de su padre. Porque son una
continuación de ellos. Esta mano ha sido transmitida a ustedes por su madre,
por su padre. También es la mano de sus ancestros. Entonces, no crean que
ésta es sólo su mano. Esta es la mano de varias generaciones. Y ustedes van
a transmitir esto a sus hijos y los hijos de sus hijos.
Toda tu sabiduría, toda la sabiduría, toda la experiencia, todo el sufrimiento,
toda la felicidad de todas las generaciones de tus ancestros están aquí en tu
mano. Nuestros ancestros, su sabiduría, su felicidad, su tristeza, su
esperanza, su temor, están aquí dentro de ti. Todos ellos te han sido
transmitidos. En cada célula de tu cuerpo encuentras todo: toda la
esperanza, todo el temor, toda la felicidad, todo el sufrimiento de todos los
ancestros están en cada célula tuya. Ahora la humanidad es capaz de
clonarse. Necesitamos sólo tomar una célula, cualquier célula de nuestro
cuerpo, y podemos duplicarnos.
Esto significa que en cada célula está la presencia de ti como un todo. El uno
es el todo, esta es la enseñanza del Buddha en el Sutra Avatamsaka. Y en
cada célula de nuestro cuerpo está el infierno, está la Tierra Pura. Está el
Buddha, está Mara, está Jesús, está Satán, está la felicidad, está la tristeza,
en sólo una célula. Todos nuestros ancestros pueden ser tocados, pueden ser
hallados en cada célula, porque una célula lo contiene todo. Y esto no es sólo
una idea abstracta. Han oído sobre la técnica de clonación. Sabemos que una
célula puede manifestarse como la cosa completa. Así que mira tu propia
mano, y verás que las células de tu mano son también las células de tu
padre, de tu madre, de tus ancestros. Muchos de ellos eran sabios, eran
felices. Convoca a esos elementos en ti para que vengan a ayudarte y a
rescatarte.
Tienes ancestros de sangre y también tienes ancestros espirituales en ti. Si
yo sólo tuviera ancestros de sangre, no podría ser yo mismo, como soy
ahora. Ahora uso mis ojos de un modo tal como mis ancestros no lo hicieron.
He aprendido el modo de ver del Buddha. Veo las cosas con atención. Veo las
cosas y toco la naturaleza de inter- ser en ellas. El modo en que miro el
cielo, el guijarro, la persona, es muy profundo. Y sin el Buddha, mi maestro,
no podría verlos así. El modo en que respiro, el modo en que camino,
también. Mis pies, caminando, son también los pies del Buddha. Estoy
caminando con los pies del Buddha. No sólo camino con los pies de m madre
y los pies de mi padre, sino también camino con los pies del Buddha, porque
a cada paso puedo generar gozo y paz.
Ustedes tienen a su amado padre dentro de ustedes. Tienen a su
amada madre en ustedes. Tienen a su amado maestro en ustedes. Su
maestro puede ser Jesús, su maestro puede ser el Buddha, y de
acuerdo a su práctica, su maestro puede ser más o menos evidente,
poderoso, en ustedes.
Supongamos que tienen un punto doloroso en su cuerpo. ¿Por qué no
convocan a su padre, a su madre, a sus ancestros, para que los ayuden?
Toquen ese punto doloroso con la energía de curación, de amor. Porque
ustedes saben cuán profundamente en él, su padre los ama, profundamente
en ella, su madre los ama, profundamente en él, su maestro los ama y
quiere que estén bien.
Supongamos que tienen un tumor que podría volverse importante y los
doctores dicen que la única forma es abrirlos y quitarlo y tirarlo. Esta es
nuestra tendencia. Si hay algo que no queremos, tendemos a cortarlo y a
tirarlo: cirugía. Hemos creado las cosas dolorosas en nuestro cuerpo y no las
queremos más, queremos tirarlas. Es lo mismo con su mente, su conciencia.
Hay tumores en su conciencia, el tumor del odio, de la desesperación, de la
depresión. Y también queremos cortarlos y tirarlos.
Este es un modo de vida, un hábito de pensamiento que hemos aprendido de
esta sociedad nueva. Si no quieren algo, lo eliminan ya sea usando una
pistola o un cuchillo. Debemos mirar profundamente en nuestra civilización y
ver en qué dirección estamos yendo. Cuando tenemos algo doloroso en
nosotros, no sabemos cómo cuidarlo bien. No sabemos cómo abrazarlo del
modo en que abrazamos a nuestro bebé. Queremos sacarlo, tirarlo.
Queremos castigarlo.
Entonces, inhalamos profundamente, y vemos que esta mano es la mano de
tu padre, de tu amado padre, o de tu amada madre o de tu amado maestro.
Incluso aunque ella ya no viva, aun es real en ti porque cada célula en ti es
también ella. Cada célula en ti es también él. Convócalos para que te
ayuden. Hay células saludables en ti, y las células saludables vendrán a
rescatar a las células que no están tan saludables. Porque no sabes cómo
cuidarlas, algunas de ellas están cansadas y están siendo transformadas en
un problema.
Así que inhala y trae a tu padre, a tu madre, y a tu amado maestro de nuevo
a tu mano. Dices el nombre de tu padre; el nombre de tu maestro y
súbitamente tu mano se vuelve la mano de tu madre, de tu maestro. Y
entonces, cuando exhalas, toca el punto doloroso. Respira lentamente.
Transmite todas esas energías al punto doloroso. Y después de que termines,
hazlo de nuevo. Inhala, llama su nombre, y lo haces vivir. La energía de tu
padre o de tu maestro estará presente en tu mano. Y cuando exhalas
sonríes, y la energía de tu padre o de tu maestro penetrará en ti. Practica así
todos los días, ya sea en posición sentada o en una posición acostada.
En el momento en que practicas estás totalmente relajado. Tienes fe en la
gente que te ama, que quiere desearte el bien. Entonces los haces presentes
en la forma de energía y usas esa energía para tocar y sanar. Tu mano tiene
un poder curativo. No necesitas nada más. Cada uno de nosotros tiene un
poder curativa dentro, una energía que puedes generar en la palma de tu
mano. Esa energía es almacenada en cada célula de tu cuerpo. Aprende a
hacerlo con tu cuerpo. Si tienes un hígado que no funciona tan bien, que está
sufriendo, concéntrate, invita a tu padre, a tu madre.
No tengo duda de que mi padre siempre me amó. Y no considero a mi padre
como no existente, porque mi padre está en cada una de mis células. Cuando
lo convoco, él está de vuelta en cada célula de mi cuerpo. Cuando genero esa
energía llamada la energía de un padre amoroso, me toco y digo: “Padre, por
favor, ayúdame”. Y tu padre estará transmitiéndote esa energía. Durante ese
momento te sientes pacífico, sabiendo que estás siendo amado, siendo
cuidado por tu padre.
¿Recuerdas cuando eras un niño pequeño, tenías una fiebre y tu lengua
estaba tan amarga que no podías comer nada? Y tu frente se sentía como si
estuviera hirviendo y cuando llegaba tu madre ponía su mano sobre tu
frente, y súbitamente te sentías como en el paraíso. Sólo una mano. Te
sentías mucho mejor con la presencia de tu madre y sólo una mano. No
creas que esa mano ya no está allí. Aun está allí porque tu mano es la
continuación de la mano de tu madre. Y si la llamas: “¿mami? Por favor,
ayuda”, cuando inhalas y luego, cuando pones la mano sobre tu frente y
exhales, recibirás exactamente la misma energía. Nada está perdido.
Cuida de tu cuerpo de ese modo. Permite a tu cuerpo descansar en cualquier
posición en que estés. Y más tarde serás capaz de cuidar de tu espíritu, tu
espíritu doliente, del mismo modo. Tienes bloques de dolor, de tristeza, de
temor, de desesperación en ti. Debes abrazar esos bloques de dolor y
tristeza exactamente del mismo modo. Llámalos para que ayuden.
El Buddha a ser no es algo abstracto. El Buddha es muy profundo en mí
porque he aprendido la práctica. He aprendido a mirar del modo en que
miraba el Buddha. He aprendido a respirar del modo en que respiraba el
Buddha. He aprendido a caminar del modo en que caminaba el Buddha. En la
Montaña Gridhrakuta donde el Buddha estuvo durante más de veinte años,
me senté y contemplé el mismo atardecer que él había contemplado. Yo
estaba mirando con mis ojos y sus ojos el mismo hermoso atardecer.
Tú también eres capaz de mirar con los ojos del Buddha. En tu vida diaria
estás acostumbrado a mirar con tus ojos, los ojos que no tienen la energía
de la atención y la concentración detrás de sí. Pero con tu respiración
conciente, puedes generar los ojos de Buddha en ti. Cuando usas esos ojos
para mirar, verás las cosas muy diferentes. Es como tener un par de
binoculares, y si los llevas a tus ojos, verás diferente. Entonces, tienes los
ojos del Buddha transmitidos por tu maestro. ¿Por qué no usarlos? Sólo
inhala, exhala, genera la energía de la atención, y súbitamente tienes los
ojos de Buddha. Mirando con los ojos del Buddha, no tendrás ira. No tendrás
desesperación.
No deberías tener ningún complejo. El Buddha es suficiente, Jesús es
suficiente. Jesús dijo así: “Soy el padre, el padre está en mi, yo estoy en
ustedes, y ustedes están en mí.” Muy claro. No pueden negar esa enseñanza
en el corazón de la Cristiandad.
Entonces, si el Buddha está en ti, ¿por qué no llamarlo para que ayude? Sólo
inhalen y exhalen y Buddha estará vivo, pueden usar los ojos del Buddha, las
manos del Buddha. “Querido Buddha, por favor, ayuda”, y súbitamente
tienen la mano del Buddha a su disposición. Qué simple. ¿Qué más
aprendes? Esto es muy simple, fácil de comprender, y aun así muy profundo.
La curación que quieres, puedes proveerla por ti mismo. Estás apoyado por
la Sangha, por el Dharma, por el Buddha, cada momento de tu vida diaria. Si
sólo sabes esto, comprenderás que el apoyo está siempre disponible y
entonces no te sentirás solo y asustado.
Así que hoy, en el comentario de Dharma, por favor discutan esta práctica.
Permitámonos descansar. Permitamos a nuestro cuerpo descansar. Hay
técnicas de descanso. Puede que no estén acostumbrados a ellas pero son
buenos hábitos para aprender. Hemos aprendido la otra clase de hábito de
no descansar, y ahora debemos aprender un hábito positivo para ser capaces
de descansar – física y mentalmente. Y debemos compartir con los demás los
modos en que hacemos esto para llegar a un estado relajado del cuerpo y de
la mente.
Caminar es una manera de descansar, sentarse es un modo de descansar,
comer es un modo de descansar. No luchen. Hemos luchado toda nuestra
vida; no hemos ido a ninguna parte en absoluto. Detengan la lucha y cuiden
de su cuerpo, de su mente. Practiquemos el descanso y restaurémonos, y
llegaremos muy lejos.
Iremos juntos y comentaremos esto. Compartiremos nuestra experiencia de
la práctica del descanso. Hay hermanos y hermanas que han estado en la
práctica durante mucho tiempo, ellos pueden compartir su práctica. Pueden
hacer preguntas. Y practiquemos el primer día, el segundo día, y entonces
nos volveremos a encontrar y compartiremos nuevamente nuestra práctica.
Si tienen alguna dificultad, si tienen alguna pregunta, o si tienen algún éxito,
algún gozo en su práctica, por favor compartan eso con los demás.
Practicamos como una Sangha. Hay maestros de Dharma disponibles en
nuestro medio, también hay hermanos y hermanas que son familiares con la
enseñanza y con la práctica. Así que aprovechemos su presencia.
Y cuando te sientas concentrado y atento, y disfrutas de tu práctica de
caminar, de respirar, de sonreír, entonces contribuirás mucho a la Sangha.
Porque si te vemos relajado, caminando con atención, sonriendo, respirando
con atención, recordaremos hacer lo mismo. Juntos, produciremos esa
energía colectiva que nos nutre. Cuando vamos a casa, podemos continuar la
práctica aun con nuestros niños. Porque los niños en Plum Village probaron
que son capaces de practicar.
Notas:
Queridos amigos: Esta trascripción de charlas Dharma son enseñanzas
ofrecidas por el Venerable Thich Nhat Hahn en Plum Village o en varios
retiros alrededor del mundo. La enseñanza atraviesa todas las áreas de
interés de los practicantes, desde las emociones difíciles hasta la
comprensión de la naturaleza del inter-ser de nosotros mismos y todas las
cosas, y mucho más.
Este proyecto opera desde Dana, la generosidad, así que estas charlas están
disponibles para todos. Pueden enviarlas y redistribuirlas por e mail, y
pueden también imprimirlas y distribuirlas entre los miembros de su Sangha.
El propósito de esto es hacer las enseñanzas de Thay accesibles a tanta
gente como sea posible que las reciba. Lo único que pedimos es que por
favor las hagan circular como son, por favor no las distribuyan o
reproduzcan en forma alterada de ningún modo.
http://www.plumvillage.org
treinta de julio de 1997, y estamos en el Hamlet Superior. Hemos estado
practicando meditación sobre los guijarros durante las dos semanas pasadas,
y espero que los niños que recién llegaron ayer y hoy continúen con nuestra
práctica de los seis guijarros. Hay niños que han estado aquí durante las dos
últimas semanas, y ellos les mostrarán cómo practicar meditación sobre los
guijarros. Ustedes harán una pequeña bolsa como esta, y encontrarán seis
guijarros como estos, pequeños guijarros. Lávenlos cuidadosamente,
séquenlos, y pónganlos en la bolsa.
Hoy aprenderemos juntos un breve poema, los jóvenes y también los menos
jóvenes. Vamos a usar los guijarros para practicar el poema también. Sería
maravilloso si pudieran memorizar el poema breve para practicar. Algunos de
ustedes ya lo conocen de memoria, pero puede haber algunos de ustedes
que aun no hayan sido introducidos a la práctica de este poema.: “Adentro,
afuera. Profundo, lento. Calma, tranquilidad. Sonríe, relaja. Momento
presente, momento maravilloso.” Me imagino que la mayoría de nosotros ya
lo podemos cantar. ¿Cantamos?
Adentro, afuera.
Profundo, lento.
Calma, tranquilidad.
Sonríe, relaja.
Momento presente,
Momento maravilloso.
Este es un poema maravilloso, porque cada vez que lo practicas te sentirás
mucho mejor dentro de tu cuerpo y tu mente. Cuando estás enojado, cuando
estás preocupado, cuando sufres, si sabes cómo practicar este poema
entonces te sentirás mucho mejor sólo después de uno o dos minutos.
Voy a recordarles el modo de practicar. Primero, “adentro” y “afuera”. Esto
significa que cuando inhalo, sé que estoy inhalando. Es fácil. Y cuando
exhalo, sé que estoy exhalando. No mezclo las dos cosas. Inhalando, sé que
esta es mi inhalación. Exhalando, sé que es mi exhalación. Por ese momento,
detienes todo el pensamiento, sólo prestas atención a tu inhalación y a tu
exhalación. Estás 100% con tu inhalación y con tu exhalación.
Es como sostener a un bebé de tal modo que lo sostienes con el 100% de tu
mismo. Supongamos que esto es un bebé y sostengo al bebé así. Sostengo
al bebé con el 100 % de mí mismo. Recuerden, hay veces en que su madre
los sostiene así. ¿Han visto la imagen de la Virgen María sosteniendo al niño
Jesús? Ella lo sostiene así: 100%. Entonces aquí, nuestra inhalación es
nuestro bebé, y sostenemos nuestra inhalación al 100 %. “Inhalando, sé que
estoy inhalando”. Sólo abrazas a tu inhalación, nada más. No pienses nada
más. Este es el secreto del éxito.
Cuando inhalas, simplemente inhalas, no hagas nada más. ¿Crees que lo
puedes hacer? Les pregunto a los adultos, también, ¿creen que pueden
hacerlo? Sólo abracen su inhalación – respiren con el 100% de ustedes
mismos- mente y cuerpo juntos. Y cuando exhalen, abracen su exhalación.
Identifiquen su inhalación como inhalación, porque cuando sostengo a mi
bebé yo sé que este es mi bebé, no otra cosa. Así, “adentro, afuera” significa
“inhalando sé que esta es mi inhalación, exhalando, sé que esta es mi
exhalación”. Es muy simple, pero es maravilloso. Estoy seguro de que si lo
intentan, después de dos o tres inhalaciones y exhalaciones ya se sentirán
mucho mejor. Puedo garantizarlo porque lo he hecho y siempre se siente
maravilloso.
Si están por llorar, si están por patear o golpear algo porque tienen ira, y si
saben cómo volver a ustedes mismos y practicar “adentro, afuera” tres
veces, estoy seguro de serán diferentes. No llorarán, no patearán, no
golpearán porque son personas mucho mejores después de practicar
“adentro, afuera”. Hoy, intenten y verán el poder de la práctica.
Entonces, después de haber practicado “adentro, afuera”, tres, cuatro, o
cinco veces, sentirán que su inhalación se ha vuelto más profunda y su
exhalación se vuelve más lenta. Porque cuando están enojados, cuando
están en desesperación, cuando sufren, su inhalación y su exhalación son
muy cortas y no calman en absoluto. Pero luego, después de haber respirado
apaciblemente, su inhalación será muy suave. Su exhalación también.
Entonces la calidad de su respiración ha sido mejorada. Su inhalación es más
profunda y más calma, su exhalación también es más profunda y más calma.
Esta es la razón por la cual podemos practicar “profundo y lento”.
Inhalando, sé que mi inhalación se ha vuelto más profunda, y cuanto más
profunda es, más placentera se vuelve. Intenten inhalar varias veces y verán
que es más profunda. Y cuando es más profunda, sentirán mucho placer.
Cuando exhalan, dicen “exhalando, sé que mi exhalación se ha vuelto más
lenta, más lenta, más pacífica”. Si su respiración es más profunda, ustedes
son más profundos. Si su respiración es más lenta, ustedes son más lentos.
Esto significa que son más pacíficos. Entonces, inhalando, sé que mi
respiración se ha vuelto más profunda. Exhalando, sé que mi respiración se
ha vuelto más lenta. Es maravilloso.
Podrían usar sus guijarros también. Si están practicando meditación
sentados, pongan los guijarros a su izquierda, se inclinan hacia sus guijarros,
y levantan un guijarro con dos dedos. Un guijarro. Lo miran y lo ponen en la
palma de su mano izquierda y comienzan a practicar inhalar y exhalar,
“Adentro, afuera”. La práctica es suave. “Adentro, afuera”. Una vez más.
“Adentro, afuera”. Se sentirán mucho mejor. Entonces, uso mis dos dedos
para tomar el guijarro y ponerlo a mi lado derecho. He practicado “adentro,
afuera” ya.
Ahora, me gustaría practicar “profundo, lento”. Entonces, tomo otro guijarro.
Lo miro. Lo pongo en mi mano izquierda y comienzo a practicar. “Profundo,
lento”. Se ha vuelto más profundo por sí mismo, no tienen que hacerlo más
profundo. Se ha vuelto más profundo por sí mismo solo porque ya han
practicado tres veces “adentro, afuera”. Esta es la razón por la cual su
respiración se vuelve más profunda naturalmente, y más lenta. Practiquemos
juntos “profundo, lentito”, tres veces. “Profundo, lento” (pausa para tres
respiraciones). Bien, hemos terminado con “profundo, lento”. Levantamos el
guijarro y lo colocamos a nuestro lado derecho.
Ahora practicamos la tercera línea: “calma, tranquilidad”. Esto significa
“inhalando, siento calma. Exhalando, siento que tomo todo con tranquilidad”.
Este ejercicio es maravilloso para practicar, especialmente cuando están
nerviosos, cuando están enojados, cuando no sienten paz en ustedes.
¡Rápido, rápido! Deben volver a su inhalación y exhalación y practicar
“calma, tranquilidad”.
Este es un ejercicio dado por el mismo Buddha en un sutra llamado
Ânâpânasati Sutra, el “Sutra de la respiración conciente”. “Inhalando, calmo
las formaciones mentales en mi. Exhalando, dejo ir”. Dejo ir mi ira. Calmo mi
ira, calmo mis preocupaciones, calmo mis celos. Y dejo ir mi ira, dejo ir mis
celos. Creo que los adultos tienen que practicar junto a los niños. Cada vez
que el niño está enojado entonces su madre o su padre deberían tomar su
mano e invitarlo a practicar. “Calma, tranquilidad”. “Vamos, juntos,
practiquemos calma y tranquilidad. Inhalando, me calmo, exhalando, dejo
ir”, al menos tres veces y se sentirán mucho mejor.
Pueden comenzar directamente con “Calma, tranquilidad”, o podrían
comenzar de un modo clásico con “Adentro, afuera”, y luego “Profundo,
lento”, y finalmente “Calma, tranquilidad”. De cualquier modo está bien. El
Buddhadharma es maravilloso. El momento en que tomas el dharma y
practicas comienzas a sentirte mejor justo en ese momento. Y a medida que
continúas la práctica, tu calidad de ser siempre sigue mejorando.
Les propongo practicar tres veces “Calma, tranquilidad” pero nadie les impide
practicar más que eso: cuatro veces, cinco, seis veces, si quieren. Creo que
les gustará porque los hace sufrir menos. Y si pueden practicar ocho veces,
diez veces, se sentirán mucho mejor. “Calma, tranquilidad”.
Luego llegarán al cuarto guijarro, y este es “Sonríe, relaja. Sonríe, relaja”.
“Inhalando, sonrío”. Pueden sonreír ahora. Pueden sentir que es muy difícil
sonreír, demasiado difícil sonreír. Pero después de haber practicado tres o
cuatro veces sentirán que son capaces de sonreír. Y si pueden sonreír, se
sentirán mucho mejor. Pueden protestar: “Thay2, no tengo alegría en mí,
¿por qué quieres que sonría? Eso no es natural.” Muchas personas me
preguntan así, no sólo niños, sino gente crecida. Protestan: “Thay, no tengo
alegría en mí. No puedo forzarme a sonreír, no sería verdad, no sería
natural”.
Siempre digo que una sonrisa puede ser una práctica, una clase de práctica
de yoga. Yoga de la boca: sólo sonrían aunque no sientan alegría, y verán
después de sonreír que se sienten diferentes. A veces la mente toma la
iniciativa y a veces deben permitir que el cuerpo tome la iniciativa.
A veces el espíritu guía, y a veces el cuerpo puede guiar. Esta es la razón por
la cual cuando tienen gozo, naturalmente sonríen. Pero a veces pueden
permitir que la sonrisa vaya primero. Intentan sonreír y súbitamente sienten
que ya no sufren tanto. Así que no discriminen contra el cuerpo. El cuerpo
también puede ser un guía, no sólo el espíritu. Les propongo que intenten
esto cuando despiertan durante la noche. Está totalmente oscuro. Inhalen y
sonrían, y verán. Sonrían a la vida. Están vivos, sonríen. Esta no es una
sonrisa diplomática, porque nadie los ve sonreír. Aunque la sonrisa es una
sonrisa de iluminación, de gozo – el gozo que sienten por estar vivos.
Así que sonreír es una práctica. No digan: “No tengo alegría, ¿por qué debo
sonreír? Porque cuando tienen alegría y sonríen, eso no es práctica, es muy
natural. Cuando no tienen alegría y sonríen, eso es una práctica real. Ustedes
saben que hay algo así como 300 músculos, pequeños y grandes en su
rostro. Cada vez que estamos enojados o preocupados todos esos músculos
están muy tensos. Cuando la gente los mira con esa tensión en su rostro,
ellos no los ven como una flor. Las personas les temen cuando todos los
músculos en su rostro están así de tensos. Parecen más una bomba que una
flor. Pero si saben cómo sonreír, en solo un segundo, todos esos músculos
están relajados y su rostro parece una flor nuevamente. Es maravilloso.
Así que debemos aprender a sonreír y entonces nos veremos presentables en
ese momento. Miren al espejo y practiquen, y verán que la práctica de la
sonrisa es muy importante. Trae relajación y pueden dejar ir. Sienten que
están liberados de la atadura de la ira, de la desesperación. (Campana)
A mi derecha, ya hay cuatro guijarros. Ahora me gustaría practicar el quinto
guijarro. Esta es la práctica más maravillosa. El quinto guijarro puede
traerles mucha alegría, mucha iluminación, mucho deleite. Esto es “Momento
presente, momento maravilloso. Momento presente, momento maravilloso”.
Esta es una enseñanza muy profunda del Buddha. El Buddha dijo que es
posible vivir felizmente aquí mismo y ahora mismo. No tenemos que ir al
futuro. No tenemos que ir a otra parte para ser felices. Podemos ser felices
aquí mismo y ahora mismo. No necesitan más condiciones para ser felices,
ya tienen suficientes condiciones para ser felices aquí mismo y ahora mismo.
Si sabemos cómo ser nosotros mismos y mirar adentro y alrededor de
nosotros, vemos que hemos tenido condiciones suficientes para ser felices.
Esta es la práctica de vivir felizmente en el momento presente.
Cuando inhalan, sienten que están vivos. La vida es accesible para ustedes,
ahora: el cielo azul, la nube blanca, la vegetación verde, los pájaros
cantando. Plum Village está aquí. Muchos amigos están aquí. Su padre aun
está vivo, su madre está con ustedes, su hermano está aquí, su hermana
está aquí. Tienen pies fuertes. Pueden correr. Tienen ojos que pueden
ayudarlos a ver todo. Hay muchas condiciones para su felicidad, no necesitan
nada más, pueden ser felices ahora mismo. Dejen de correr. Esta es la
práctica. Porque hay gente que corre toda su vida; ellos corren porque creen
que la felicidad no es posible en el aquí y el ahora.
Así que esta es una enseñanza maravillosa del Buddha. Inhalan y dicen
“Momento presente”. Esto significa “me establezco en el momento presente.
No necesito correr más”. Esta es la práctica de samatha, detener. Detener el
correr. Estoy maravillosamente así en mi posición de sentado o en mi
posición de caminar o incluso en mi posición acostado. Es tan maravilloso
que no necesito correr más. Detener. Momento presente, momento
maravilloso. Es maravilloso que estén vivos.
Estar vivos, esto es un milagro. Imaginen a una persona que ya está muerta.
Puede que no hayan visto a una persona muerta pero habrán visto a un
pájaro muerto, un animal muerto. No importa lo que hagan, el animal no
puede volver a la vida. Cualquier cosa que digan, cualquier cosa que hagan,
el animal no puede escuchar, oír. Una persona muerta también es así. Yace
en la cama y no importa lo que hagan, no pueden revivirla. No pueden
volverla a la vida nuevamente. Lloran, golpean su pecho, tiran de su cabello.
Pero esa persona ya está muerta.
Entonces, cuando se miran a ustedes mismos, ven que aun están vivos. Ven
que la persona que aman aun está viva. Esto es maravilloso. Deben
despertar a este hecho. La enseñanza del Buddha es la enseñanza del
despertar, despertar a ver todas estas cosas maravillosas aun están
disponibles. Entonces dejan de correr, se establecen en el momento
presente. “Inhalando, estoy en el aquí y en el ahora. Momento presente.
Exhalando, siento que este es un momento maravilloso, maravilloso”.
El Buddha dijo que la vida está disponible sólo en el momento presente. El
pasado se ha ido, el futuro aun no llegó, tienen sólo un momento para estar
vivos. Ese es el momento presente. Tan simple y tan profundo. Tienen una
cita con la vida. No deberían perder esa cita. La vida es lo más precioso.
Deben conocerla, deben estar con ella. Y ustedes saben algo, la vida solo
está disponible en el aquí y el ahora, en el momento presente. Así que no
pierdan su cita con la vida. No pierdan el momento presente. Esta es la razón
por la cual la quinta práctica es maravillosa. Si practican así, tienen mucha
alegría ya sea que estén en su almohadón o en su cama o en la posición de
meditación caminando. “Momento presente, momento maravilloso”.
Ahora me gustaría pedirles que cantemos y practicaré. Practico por ustedes.
Practicaré inhalar y exhalar y disfruto por ustedes.
(La comunidad canta: “Adentro, afuera. Profundo, lento. Calma, tranquilidad.
Momento presente, momento maravilloso”).
Creo que por ahora todos conocen el gatha3 de memoria. Me gustaría
decirles que este gatha es también bueno para practicar meditación
caminando. Haremos meditación caminando después de la charla y ustedes
pueden caminar pacíficamente y felizmente con este poema. Inhalan y hacen
dos pasos. Dicen: “Adentro, adentro”. Luego exhalan y hacen otros dos
pasos: “afuera, afuera”. Esto es meditación caminando. No hacen nada más.
Su mente y su cuerpo están totalmente para el inhalar, el exhalar, y el dar
los pasos. Están perfectamente concentrados en caminar y respirar, no se
preocupan con otras cosas. Y pueden seguir con: “Adentro, afuera” así por
unos minutos. Si quieren caminar un poco más rápido, pueden hacer tres
pasos mientras inhalan y exhalan.
Lo hacen muy naturalmente, de tal modo que tienen mucho placer. No sean
tan serios, tan solemnes. Lo hacen muy, muy naturalmente. “Adentro,
adentro, afuera, afuera”. Si disfrutan el caminar, se sienten maravillosos.
Están haciendo la práctica correctamente. Después de algún tiempo, cambian
a “profundo, lento”. “Profundo, profundo, lento, lento, profundo, profundo,
lento, lento”. Muy concentrados. Y estaremos caminando con ustedes. Todos
están concentrados. Todos están pacíficos. Todos están gozosos. La energía
del gozo y de la paz irradiará de cada persona, y si caminamos así en la
Sangha, recibiremos la energía colectiva y será muy, muy fuerte.
Queda aun otro guijarro. Pero para este gatha no necesitamos todos los
guijarros, sólo necesitamos cinco. Después de que hayan practicado cinco
gathas, su meditación sentada está hecha. Así que escuchan el sonido de la
campana, juntan sus guijarros, y los ponen en su bolsita.
¿Creen que mi bolsita es hermosa? Me gusta mucho este color. Si quieren
tener su bolsa en amarillo o naranja, son bienvenidos. Hagan una bolsa de
guijarros muy hermosa para su meditación porque van a practicar usándola
aquí. Y cuando vayan a casa continuarán usando su bolsa de guijarros de
meditación. Si los adultos quieren imitar, son bienvenidos. Es maravilloso.
Hay algunos de nosotros que tenemos rosarios – de 108 cuentas4- y el uso
del rosario es exactamente como el uso de los guijarros. Pero creo que de
este modo es divertido.
Así que por favor, jóvenes, creo que hoy tienen muchas cosas por hacer.
Háganlas con alegría. Espero que los niños que han estado aquí durante una
o dos semanas transmitirán la enseñanza de los guijarros de meditación a los
niños nuevos y entonces practicaremos juntos. Ahora, cuando escuchen la
campana, por favor pónganse de pie e inclínense a la Sangha antes de irse y
continuar la práctica. (Campana)
Me gustaría darles un poco más de instrucción acerca de la respiración
conciente. No intenten inhalar. No hagan ningún esfuerzo para inhalar. Es
muy importante. Permítanse inhalar naturalmente. Ustedes respiran de
todos modos, ¿por qué deben hacer una determinación para inhalar? Ese es
el punto. Permítanse inhalar normalmente. Sólo presten atención a su
inhalación. No digan: “Mi inhalación, ven aquí, te diré cómo hacerlo”. No.
Permítanse inhalar, eso es todo. Corto o largo, permitan que sea como sea.
Sean completamente no violentos mientras sostienen a su bebé. No fuercen
a su bebé para ser así o ser de otro modo, permitan que sea como es.
Abrácenlo sólo con su atención. Es muy importante.
Cuando aman a alguien, le permiten ser. No dicen: “Si no haces esto, no te
amaré”. Esta ya es la práctica del amor. Permitir a su inhalación ser ella
misma. Sólo abrazarla con la energía de la atención. “Inhalando, estoy
conciente de que inhalo”. Eso es todo. El impacto será grande.
Muchas personas practican como ellos son en un duro campo de trabajo. Se
fuerzan a ustedes mismos, hacen demasiado esfuerzo, y se cansan después
de algún tiempo. Si saben cómo permitirse descansar, permitir a su
inhalación y a su exhalación fluir naturalmente, nunca se cansarán. Sólo
necesitan encender su atención y estar concientes de eso. Como cuando
encienden la luz, sólo encienden la luz. Y a causa de la luz ustedes son
concientes de que la campana está allí, su amigo está allí. La conciencia es
así. Entonces reconocen su inhalación como una inhalación, su exhalación
como su exhalación, y las abrazan con amor.
Entonces en ningún tiempo en absoluto, su cualidad de ser será mejorada.
Como un bebé sufriendo que está pateando, llorando, vibrando. Ustedes no
dicen: “¡Ahora, detente, no llores, no te agites!” No dicen eso. No hacen
nada; no intervienen. No lo fuerzan para ser como ustedes quieren. Sólo
levantan al bebé y lo abrazan con todo su ser. Cuando tienen la energía de la
ternura, de amor y cuidado, esa energía naturalmente penetrará en el bebé y
habrá una transformación. Muchos de ustedes han sido una madre o un
padre y saben esto. Sólo sostienen al bebé con su ternura, con la totalidad
de su presencia. Y a esa presencia total, cuerpo y mente concentrados,
podemos llamarla atención (y ustedes son capaces de ser atentos, ustedes
saben). Entonces cultiven su atención de modo que sean más atentos, de
estar allí para su sufrimiento, para ustedes mismos, para sus personas
amadas.
En la meditación sentada también lo hacen así. No luchen para sentarse.
Permítanse sentarse de un modo relajado. “Sonríe, relaja”. Recuerden, ¿hubo
un tiempo en que se sentarían en su living mirando televisión? ¿Podrían
sentarse durante una hora, incluso dos horas? Y no se quejaban de que
tenían dolor en los hombros o brazos. Sólo permítanse sentarse. La
meditación sentada no es una lucha. Si la toman como una lucha, se
cansarán. Después de quince minutos sentirán dolor en sus hombros y en su
cabeza. Entonces, permítanse descansar. Cuando practican meditación
sentada, meditación caminando, permítanse descansar. Es posible descansar
mientras se practica la meditación caminando, la meditación sentada, la
respiración conciente. De hecho, les ofrezco esta práctica como un medio
de descanso.
Muchos de nosotros tomamos vacaciones. Pero durante el tiempo de
vacación no sabemos cómo descansar. Entonces después de la vacación
estamos más cansados. Así, ahora nos permitimos descansar nuestro cuerpo
y nuestro espíritu. Aquí, estamos aprendiendo el arte de descansar.
Meditación como la práctica del descansar.
Nuestro cuerpo tiene la capacidad de curarse a sí mismo. Ustedes lo saben.
Cuando se cortan un dedo, ¿tienen que hacer algo? No. Sólo deben
mantenerlo limpio y en pocos días se habrá curado. Su cuerpo tiene un
número de problemas dentro porque no le han permitido descansar. Si
ustedes conocen el arte de la relajación total, el arte de permitir a su cuerpo
descansar, la mayoría de esos problemas se irán después de algunas
semanas.
Cuando un animal está herido en los bosques, sabe cómo hacer esto. Busca
un rincón apacible en la selva y yace durante varios días. Varias
generaciones de ancestros les han transmitido la sabiduría de que esta es la
única forma de restaurarse a sí mismos. Ellos no necesitan doctores, no
tienen farmacéuticos, pero saben cómo descansar. Y un día el animal está
curado y se levanta y va a buscar una fuente de alimento.
Nosotros no sabemos cómo hacer como los animales. Para recuperarnos bien
rápidamente hacemos muchas intervenciones en nuestro cuerpo: tomamos
un montón de drogas; soportamos un montón de tratamientos. Pero no
sabemos cómo permitir a nuestro cuerpo descansar. Así que aprender cómo
permitir que tu cuerpo descanse es una práctica muy importante. Ama a tu
cuerpo. Aprende la relajación total y puedes hacerlo varias veces al día.
Cinco minutos es suficiente, diez minutos. Incluso tres minutos ya están muy
bien si sabes cómo permitir a tu cuerpo que descanse completamente.
Y para tu espíritu es lo mismo. Nuestra conciencia puede curarse a sí misma.
Tiene el poder de auto curarse pero ustedes no le permiten descansar.
Continúan alimentando su conciencia con su ira, sus preocupaciones, su
pensamiento, y demás. Ustedes no creen en su conciencia. Están buscando
un medio de curarla pero no saben cómo permitirse descansar. Siguen
pensando todo el día y siguen preocupados todo el día. Nunca se permiten
descansar. Si saben cómo practicar relajación total, ustedes sabrán cómo
sonreír y cómo enviar su sonrisa a diferentes partes de su cuerpo. Durante
ese tiempo, han dejado de pensar y preocuparse porque están enfocados en
su cuerpo, su respiración, su caminata. Cuando practican respiración
conciente, cuando practican “Adentro, afuera, profundo, lento” no sólo
pueden nutrirse – cuerpo y espíritu- sino que pueden también detener su
pensamiento. Detener el pensamiento, detener las preocupaciones, es muy
importante. Nuestra mente es como un casete funcionando sin parar día y
noche. Tenemos un hábito. Ustedes no están allí, porque están siendo
llevados por su pensamiento, por sus preocupaciones. Pueden perderse en el
pasado, arrepintiéndose del pasado o siendo atrapados en el sufrimiento que
soportaron durante el pasado. Ya sufrieron en el pasado pero ahora quieren
sufrir más recordando el pasado. Llaman a su pasado para sufrir más. ¿Por
qué deben mostrarlo varias veces, su sufrimiento? Las vacas, cuando comen
hierba, la tragan y luego la vuelven a traer nuevamente y la tragan por
segunda vez. Muchos de nosotros hacemos lo mismo. Hemos sufrido ya en el
pasado. Pero queremos traer de nuevo nuestro sufrimiento al momento
presente y sufrir más. Nos gusta eso.
El futuro aun no llegó pero pensamos en él y nos preocupamos, y nos
volvemos asustados. No somos capaces de residir en el momento presente
donde está la vida. La vida y sus muchas maravillas están disponibles dentro
de ti y a tu alrededor y aun así no eres capaz de tocar sus maravillas porque
te pierdes en el pasado, en el futuro, y también en tus proyectos, tus
preocupaciones. ¿Cómo puede descansar tu mente y restaurarse? Nuestra
mente también tiene la capacidad de auto curarse así como nuestro cuerpo.
Recuerden cuando perdieron a alguien muy querido, sufrieron, y creyeron
que nunca se recuperarían, que nunca podrían olvidar ese sufrimiento.
Creyeron que el sufrimiento residiría con ustedes, la herida estaría con
ustedes siempre. Pero algún tiempo después se acostumbraron a eso y
fueron capaces de seguir con la vida. Esto significa que su mente, su espíritu,
era capaz de curarse a sí mismo.
Tenemos que confiar en nuestro espíritu del modo que confiamos en nuestro
cuerpo. Nuestro espíritu tiene el poder de auto curarse si sólo sabemos cómo
permitirle descansar y no continuar alimentándolo con más preocupaciones,
más proyectos, más temor. La práctica de la respiración conciente, la
caminata conciente, disfrutar de la contemplación del cielo, de la vegetación,
de estar con amigos, disfrutar las cosas en el momento presente, te ayuda a
detener esa clase de sensaciones – el corazón y el espíritu llenos de
preocupaciones y de temor. Te curarás por dentro.
Durante el tiempo en que estás aquí en Plum Village, estás rodeado de
muchos amigos que están practicando el descansar, recuperándose. Haz un
montón de relajación total, relajación conciente, caminata, y meditación
sentada, y disfruta de hacer las cosas atentamente para ayudar a la Sangha.
(Campana)
Muchos de nosotros hemos tenido la buena suerte de tener un padre
amoroso, una madre amorosa, un maestro amoroso, o un hermano o
hermana amorosos. Debemos llamarlos para que ayuden. Ya sea que estén
vivos aun o que hayan muerto, siempre están allí en ti.
Un padre siempre quiere amar a su hijo. Esta es la más profunda naturaleza
de un padre. Si ves que tu padre no te ama, es porque no fue capaz de
manifestar su amor, eso es todo. Nadie lo ha ayudado a expresar su amor.
Todos los padres, en lo profundo, quieren amar a sus hijos. Pero si dicen:
“¡Te odio! ¡No te reconozco como mi hijo!” es porque no saben cómo hacerlo.
No significa que un padre no ame a su hijo. Ustedes también, aman a sus
hijos aun si sus hijos hacen cosas que ustedes consideran negativas, que los
irritan. Aun, en lo profundo, el amor que tienen por sus hijos está intacto.
Sólo necesitan aprender cómo expresar su amor. Hay mucha gente que cree
que su padre o su madre no los ama, muchas personas son víctimas de esa
visión. Pero, de acuerdo a mi experiencia, todos los padres aman a sus hijos,
profundamente. Todas las madres también. Incluso los animales, aman a sus
hijos.
Cuando miran su mano – si miran profundamente- verán que esa mano de
ustedes es también la mano de su madre y de su padre. Porque son una
continuación de ellos. Esta mano ha sido transmitida a ustedes por su madre,
por su padre. También es la mano de sus ancestros. Entonces, no crean que
ésta es sólo su mano. Esta es la mano de varias generaciones. Y ustedes van
a transmitir esto a sus hijos y los hijos de sus hijos.
Toda tu sabiduría, toda la sabiduría, toda la experiencia, todo el sufrimiento,
toda la felicidad de todas las generaciones de tus ancestros están aquí en tu
mano. Nuestros ancestros, su sabiduría, su felicidad, su tristeza, su
esperanza, su temor, están aquí dentro de ti. Todos ellos te han sido
transmitidos. En cada célula de tu cuerpo encuentras todo: toda la
esperanza, todo el temor, toda la felicidad, todo el sufrimiento de todos los
ancestros están en cada célula tuya. Ahora la humanidad es capaz de
clonarse. Necesitamos sólo tomar una célula, cualquier célula de nuestro
cuerpo, y podemos duplicarnos.
Esto significa que en cada célula está la presencia de ti como un todo. El uno
es el todo, esta es la enseñanza del Buddha en el Sutra Avatamsaka. Y en
cada célula de nuestro cuerpo está el infierno, está la Tierra Pura. Está el
Buddha, está Mara, está Jesús, está Satán, está la felicidad, está la tristeza,
en sólo una célula. Todos nuestros ancestros pueden ser tocados, pueden ser
hallados en cada célula, porque una célula lo contiene todo. Y esto no es sólo
una idea abstracta. Han oído sobre la técnica de clonación. Sabemos que una
célula puede manifestarse como la cosa completa. Así que mira tu propia
mano, y verás que las células de tu mano son también las células de tu
padre, de tu madre, de tus ancestros. Muchos de ellos eran sabios, eran
felices. Convoca a esos elementos en ti para que vengan a ayudarte y a
rescatarte.
Tienes ancestros de sangre y también tienes ancestros espirituales en ti. Si
yo sólo tuviera ancestros de sangre, no podría ser yo mismo, como soy
ahora. Ahora uso mis ojos de un modo tal como mis ancestros no lo hicieron.
He aprendido el modo de ver del Buddha. Veo las cosas con atención. Veo las
cosas y toco la naturaleza de inter- ser en ellas. El modo en que miro el
cielo, el guijarro, la persona, es muy profundo. Y sin el Buddha, mi maestro,
no podría verlos así. El modo en que respiro, el modo en que camino,
también. Mis pies, caminando, son también los pies del Buddha. Estoy
caminando con los pies del Buddha. No sólo camino con los pies de m madre
y los pies de mi padre, sino también camino con los pies del Buddha, porque
a cada paso puedo generar gozo y paz.
Ustedes tienen a su amado padre dentro de ustedes. Tienen a su
amada madre en ustedes. Tienen a su amado maestro en ustedes. Su
maestro puede ser Jesús, su maestro puede ser el Buddha, y de
acuerdo a su práctica, su maestro puede ser más o menos evidente,
poderoso, en ustedes.
Supongamos que tienen un punto doloroso en su cuerpo. ¿Por qué no
convocan a su padre, a su madre, a sus ancestros, para que los ayuden?
Toquen ese punto doloroso con la energía de curación, de amor. Porque
ustedes saben cuán profundamente en él, su padre los ama, profundamente
en ella, su madre los ama, profundamente en él, su maestro los ama y
quiere que estén bien.
Supongamos que tienen un tumor que podría volverse importante y los
doctores dicen que la única forma es abrirlos y quitarlo y tirarlo. Esta es
nuestra tendencia. Si hay algo que no queremos, tendemos a cortarlo y a
tirarlo: cirugía. Hemos creado las cosas dolorosas en nuestro cuerpo y no las
queremos más, queremos tirarlas. Es lo mismo con su mente, su conciencia.
Hay tumores en su conciencia, el tumor del odio, de la desesperación, de la
depresión. Y también queremos cortarlos y tirarlos.
Este es un modo de vida, un hábito de pensamiento que hemos aprendido de
esta sociedad nueva. Si no quieren algo, lo eliminan ya sea usando una
pistola o un cuchillo. Debemos mirar profundamente en nuestra civilización y
ver en qué dirección estamos yendo. Cuando tenemos algo doloroso en
nosotros, no sabemos cómo cuidarlo bien. No sabemos cómo abrazarlo del
modo en que abrazamos a nuestro bebé. Queremos sacarlo, tirarlo.
Queremos castigarlo.
Entonces, inhalamos profundamente, y vemos que esta mano es la mano de
tu padre, de tu amado padre, o de tu amada madre o de tu amado maestro.
Incluso aunque ella ya no viva, aun es real en ti porque cada célula en ti es
también ella. Cada célula en ti es también él. Convócalos para que te
ayuden. Hay células saludables en ti, y las células saludables vendrán a
rescatar a las células que no están tan saludables. Porque no sabes cómo
cuidarlas, algunas de ellas están cansadas y están siendo transformadas en
un problema.
Así que inhala y trae a tu padre, a tu madre, y a tu amado maestro de nuevo
a tu mano. Dices el nombre de tu padre; el nombre de tu maestro y
súbitamente tu mano se vuelve la mano de tu madre, de tu maestro. Y
entonces, cuando exhalas, toca el punto doloroso. Respira lentamente.
Transmite todas esas energías al punto doloroso. Y después de que termines,
hazlo de nuevo. Inhala, llama su nombre, y lo haces vivir. La energía de tu
padre o de tu maestro estará presente en tu mano. Y cuando exhalas
sonríes, y la energía de tu padre o de tu maestro penetrará en ti. Practica así
todos los días, ya sea en posición sentada o en una posición acostada.
En el momento en que practicas estás totalmente relajado. Tienes fe en la
gente que te ama, que quiere desearte el bien. Entonces los haces presentes
en la forma de energía y usas esa energía para tocar y sanar. Tu mano tiene
un poder curativo. No necesitas nada más. Cada uno de nosotros tiene un
poder curativa dentro, una energía que puedes generar en la palma de tu
mano. Esa energía es almacenada en cada célula de tu cuerpo. Aprende a
hacerlo con tu cuerpo. Si tienes un hígado que no funciona tan bien, que está
sufriendo, concéntrate, invita a tu padre, a tu madre.
No tengo duda de que mi padre siempre me amó. Y no considero a mi padre
como no existente, porque mi padre está en cada una de mis células. Cuando
lo convoco, él está de vuelta en cada célula de mi cuerpo. Cuando genero esa
energía llamada la energía de un padre amoroso, me toco y digo: “Padre, por
favor, ayúdame”. Y tu padre estará transmitiéndote esa energía. Durante ese
momento te sientes pacífico, sabiendo que estás siendo amado, siendo
cuidado por tu padre.
¿Recuerdas cuando eras un niño pequeño, tenías una fiebre y tu lengua
estaba tan amarga que no podías comer nada? Y tu frente se sentía como si
estuviera hirviendo y cuando llegaba tu madre ponía su mano sobre tu
frente, y súbitamente te sentías como en el paraíso. Sólo una mano. Te
sentías mucho mejor con la presencia de tu madre y sólo una mano. No
creas que esa mano ya no está allí. Aun está allí porque tu mano es la
continuación de la mano de tu madre. Y si la llamas: “¿mami? Por favor,
ayuda”, cuando inhalas y luego, cuando pones la mano sobre tu frente y
exhales, recibirás exactamente la misma energía. Nada está perdido.
Cuida de tu cuerpo de ese modo. Permite a tu cuerpo descansar en cualquier
posición en que estés. Y más tarde serás capaz de cuidar de tu espíritu, tu
espíritu doliente, del mismo modo. Tienes bloques de dolor, de tristeza, de
temor, de desesperación en ti. Debes abrazar esos bloques de dolor y
tristeza exactamente del mismo modo. Llámalos para que ayuden.
El Buddha a ser no es algo abstracto. El Buddha es muy profundo en mí
porque he aprendido la práctica. He aprendido a mirar del modo en que
miraba el Buddha. He aprendido a respirar del modo en que respiraba el
Buddha. He aprendido a caminar del modo en que caminaba el Buddha. En la
Montaña Gridhrakuta donde el Buddha estuvo durante más de veinte años,
me senté y contemplé el mismo atardecer que él había contemplado. Yo
estaba mirando con mis ojos y sus ojos el mismo hermoso atardecer.
Tú también eres capaz de mirar con los ojos del Buddha. En tu vida diaria
estás acostumbrado a mirar con tus ojos, los ojos que no tienen la energía
de la atención y la concentración detrás de sí. Pero con tu respiración
conciente, puedes generar los ojos de Buddha en ti. Cuando usas esos ojos
para mirar, verás las cosas muy diferentes. Es como tener un par de
binoculares, y si los llevas a tus ojos, verás diferente. Entonces, tienes los
ojos del Buddha transmitidos por tu maestro. ¿Por qué no usarlos? Sólo
inhala, exhala, genera la energía de la atención, y súbitamente tienes los
ojos de Buddha. Mirando con los ojos del Buddha, no tendrás ira. No tendrás
desesperación.
No deberías tener ningún complejo. El Buddha es suficiente, Jesús es
suficiente. Jesús dijo así: “Soy el padre, el padre está en mi, yo estoy en
ustedes, y ustedes están en mí.” Muy claro. No pueden negar esa enseñanza
en el corazón de la Cristiandad.
Entonces, si el Buddha está en ti, ¿por qué no llamarlo para que ayude? Sólo
inhalen y exhalen y Buddha estará vivo, pueden usar los ojos del Buddha, las
manos del Buddha. “Querido Buddha, por favor, ayuda”, y súbitamente
tienen la mano del Buddha a su disposición. Qué simple. ¿Qué más
aprendes? Esto es muy simple, fácil de comprender, y aun así muy profundo.
La curación que quieres, puedes proveerla por ti mismo. Estás apoyado por
la Sangha, por el Dharma, por el Buddha, cada momento de tu vida diaria. Si
sólo sabes esto, comprenderás que el apoyo está siempre disponible y
entonces no te sentirás solo y asustado.
Así que hoy, en el comentario de Dharma, por favor discutan esta práctica.
Permitámonos descansar. Permitamos a nuestro cuerpo descansar. Hay
técnicas de descanso. Puede que no estén acostumbrados a ellas pero son
buenos hábitos para aprender. Hemos aprendido la otra clase de hábito de
no descansar, y ahora debemos aprender un hábito positivo para ser capaces
de descansar – física y mentalmente. Y debemos compartir con los demás los
modos en que hacemos esto para llegar a un estado relajado del cuerpo y de
la mente.
Caminar es una manera de descansar, sentarse es un modo de descansar,
comer es un modo de descansar. No luchen. Hemos luchado toda nuestra
vida; no hemos ido a ninguna parte en absoluto. Detengan la lucha y cuiden
de su cuerpo, de su mente. Practiquemos el descanso y restaurémonos, y
llegaremos muy lejos.
Iremos juntos y comentaremos esto. Compartiremos nuestra experiencia de
la práctica del descanso. Hay hermanos y hermanas que han estado en la
práctica durante mucho tiempo, ellos pueden compartir su práctica. Pueden
hacer preguntas. Y practiquemos el primer día, el segundo día, y entonces
nos volveremos a encontrar y compartiremos nuevamente nuestra práctica.
Si tienen alguna dificultad, si tienen alguna pregunta, o si tienen algún éxito,
algún gozo en su práctica, por favor compartan eso con los demás.
Practicamos como una Sangha. Hay maestros de Dharma disponibles en
nuestro medio, también hay hermanos y hermanas que son familiares con la
enseñanza y con la práctica. Así que aprovechemos su presencia.
Y cuando te sientas concentrado y atento, y disfrutas de tu práctica de
caminar, de respirar, de sonreír, entonces contribuirás mucho a la Sangha.
Porque si te vemos relajado, caminando con atención, sonriendo, respirando
con atención, recordaremos hacer lo mismo. Juntos, produciremos esa
energía colectiva que nos nutre. Cuando vamos a casa, podemos continuar la
práctica aun con nuestros niños. Porque los niños en Plum Village probaron
que son capaces de practicar.
Notas:
Queridos amigos: Esta trascripción de charlas Dharma son enseñanzas
ofrecidas por el Venerable Thich Nhat Hahn en Plum Village o en varios
retiros alrededor del mundo. La enseñanza atraviesa todas las áreas de
interés de los practicantes, desde las emociones difíciles hasta la
comprensión de la naturaleza del inter-ser de nosotros mismos y todas las
cosas, y mucho más.
Este proyecto opera desde Dana, la generosidad, así que estas charlas están
disponibles para todos. Pueden enviarlas y redistribuirlas por e mail, y
pueden también imprimirlas y distribuirlas entre los miembros de su Sangha.
El propósito de esto es hacer las enseñanzas de Thay accesibles a tanta
gente como sea posible que las reciba. Lo único que pedimos es que por
favor las hagan circular como son, por favor no las distribuyan o
reproduzcan en forma alterada de ningún modo.
http://www.plumvillage.org
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